En días pasados la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, lanzó una medida para que los niños y las niñas de las escuelas de educación básica de la capital del país puedan asistir a clases usando pantalón o falda según elijan. Esta medida, llamada uniforme mixto, evidentemente ha causado polémica en nuestro país. Ante esto nos podemos preguntar ¿Cuál es el problema con que los niños usen pantalón o falda? e incluso ¿realmente hay algún problema en esto? Para orientarnos un poco quiero aportar algunos elementos para la reflexión.
Si echamos un vistazo a las demás culturas a nivel mundial podemos ver que hay hombres que usan falda sin ningún tipo de problema, precisamente en algunas culturas es normal ver a un hombre con un tipo de vestimenta que en nuestra cultura está destinada sólo para las mujeres, y esto no determina de ningún modo su identidad u orientación sexual. Pero lo que aplica para una cultura no es válido para otra.
Debemos considerar otro aspecto muy importante, me refiero al derecho a elegir sobre la propia vida, es decir, ¿por qué no puedo usar falda si así lo decido? Bueno hay que aceptar también que cualquiera puede vestir como quiera, pero eso no quita que sea mal visto por la sociedad. Por otro lado, recuerdo que no hace muchos años era mal visto que un hombre usara una camisa de color rosa, porque podría ser señalado como homosexual, también en otro tiempo la mujer no podía usar pantalón porque eso sólo era para los hombres, sin embargo, eso ya ha cambiado. Entonces podemos ver que la cultura también evoluciona y que puede cambiar según las necesidades de las personas, eso es natural. No obstante, tenemos que aceptar nos guste o no que en nuestra cultura mexicana sólo las mujeres pueden usar una falda o un vestido, no dudo que en algún momento de la historia eso pueda llegar a cambiar, pero, atendiendo a la realidad actual, las cosas son así. Por lo tanto, la medida del uniforme mixto que ha llevado a cabo el gobierno de la Ciudad de México es un cambio artificial que no responde a las necesidades de las personas, no tiene sentido decir que un niño necesita usar falda.
Lo peor de todo es que esta medida se está haciendo con los más pequeños, los niños no tienen un criterio desarrollado para discernir sobre estos temas, es perverso tratar de que los niños tomen este tipo de decisiones. No nos puede quedar duda de que el uniforme mixto es parte de la ideología de género, que no es otra cosa que el intento de sistematizar la inmoralidad y de arrebatar a las personas su identidad que es un elemento fundamental para el sano desarrollo humano. Concluyo que el uniforme mixto puede confundir y dañar a los más pequeños, por lo tanto, debemos tener una actitud crítica y señalar abiertamente este tipo de errores en nuestra sociedad.
Por Luis Enrique Ibañez Raygoza
Seminarista de segundo de filosofía