Dentro del Seminario tenemos la celebración de las solemnidades religiosas y de algunas otras fiestas; hay momentos de convivencia, de aprendizaje, de festejo. Este espacio está dedicado a todos esos acontecimientos relevantes que suceden dentro y fuera de estos muros y que con su sencillez o su grandeza forman parte importante dentro de nuestra vida comunitaria, de la religiosidad popular y más aún cuando estos sucesos son piezas de nuestra identidad como Seminario, de nuestras costumbres y tradiciones.
Las celebraciones y solemnidades son elementos esenciales de la vida del Seminario, porque son maneras de expresar nuestra fe y alimentar nuestra vida espiritual.
El seminarista debe ser un hombre que viva la fe en su máxima expresión y es en el Seminario de donde obtiene las herramientas que después al ser sacerdote pondrá en práctica dentro de una parroquia al santificar al pueblo de Dios; el celebrar la fiesta es recordar la Pascua de Cristo, fiesta de las fiestas, que actualizamos domingo a domingo, sin hacer a un lado las fechas que nos recuerdan algunos de los principales misterios de nuestra fe.
Por citar algunos: la solemnidad de la Inmaculada Concepción, patrona de nuestro Seminario; san Mateo Correa y el beato Miguel Agustín Pro, zacatecanos; la peregrinación anual a la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, el aniversario del Seminario; Ministerios y Ordenes; incluso la participación en la religiosidad de nuestro pueblo zacatecano.

