Las vacaciones terminaron, es tiempo de retomar el camino y seguir avanzando. La etapa del Curso Introductorio Diocesano recibió con las puertas abiertas a los jóvenes que valientemente vivieron su preseminario y decidieron adentrarse en esta aventura.
La cita fue el 17 de agosto, jóvenes de distintos lugares nos reunimos para formar una nueva familia. Pero las vacaciones no terminaban del todo, pues nos esperaban las vacaciones de comunidad, las cuales se llevaron a cabo en Mezquitic, Jalisco.
Entre mezquites, bellos paisajes y el caluroso afecto de la gente, fuimos recibidos por la parroquia de san Juan Bautista, a cargo del Pbro. Paulo Medina. La gente se preparó con gran entusiasmo para acogernos y compartir con todos nosotros un poco de su cultura y de sus alimentos. Durante la semana estuvimos visitando diversas comunidades: Las bocas, Las carreras, Junta de ríos, Agua milpa, Cerro colorado.
Durante este tiempo, también estudiamos vacaciones la nueva Carta Encíclica de su santidad el Papa Francisco, Lumen Fidei. Atendiendo a esta exhortación del Papa, nos dimos a la tarea de visitar los hogares de las personas de esta comunidad parroquial, para convivir, compartir e invitarlas a descubrir y conocer más fondo la FE que nos identifica como católicos mediante esta exhortación apostólica “la Luz de la Fe”.
La etapa del curso introductorio hizo presencia en esta comunidad parroquial, fomentando y animando a los fieles a seguir al Señor en la vida diaria. Mediante catequesis, juegos, cantos, rezo del Rosarios, Misa y una peregrinación al monumento en honor a Cristo Rey alimentamos nuestra fe y devoción junto con los fieles de esta Parroquia.
Disfrutamos de los diversos paisajes, de la generosidad de la gente, del arte Wixarica y de muchas otras cosas más. Como acto final y a manera de agradecimiento, la etapa del CID organizó un pequeño festival para toda la comunidad, en el cual se presentaron diversos números: una pequeña obra de teatro, la danza de los viejitos, canciones de rondalla y un video con fotografías para recordar los buenos momentos.
La etapa del CID agradece todas las atenciones y muestras de afecto brindadas por esta bella comunidad parroquial de Mezquitic. Deseamos que Dios les multiplique su generosidad para con nosotros, también reconocemos su esfuerzo de apoyar a los futuros sacerdotes que algún día servirán a esta Diócesis. Siempre recordaremos a la gente de Mezquitic en nuestro corazón y en nuestras oraciones.